Mar Montilla
Sí. Escribir me ha gustado desde siempre, pero tardé mucho en decir “quiero ser escritora”. Me apasionaba escribir y lo hacía con facilidad, pero no me había planteado nada más, hasta que alguien me dijo un día: “¿Y si tanto te gusta escribir por qué no escribes un libro?” Después del estupor inicial le hice caso. Escribí mi primer libro, un manual de autoayuda, cuando tenía treinta y tantos años. Y decidí que quería ser escritora.
2-¿Cuándo
escribiste tu primer relato?
Cuando tenía
dieciocho años escribí mi primera novela corta. El primer relato seguramente
antes, no lo recuerdo con exactitud pero empecé a escribir a los doce, o sea
que más o menos a esa edad.
3-¿Qué es ser
escritora para ti?
Lo es todo. Es
con lo que me identifico y espero que algún día se convierta en mi medio de
vida.
4-¿Quiénes te
inspiran, a quiénes admiras?
La autora a la
que más he admirado desde mi adolescencia es Isabel Allende. He leído casi
todos sus libros y he seguido su trayectoria muy de cerca. Otros autores que me
inspiran son Almudena Grandes e Ildefonso Falcones, tanto por su estilo como
por los temas que tratan. En una etapa más reciente descubrí a Care Santos. Su
novela Habitaciones cerradas me atrapó de principio a fin, y desde entonces
también la sigo.
5-¿Tienes
rituales o manías antes, durante o después de la escritura?
Sí, algunos.
Necesito silencio y soledad, no puedo escribir con música de fondo, por
ejemplo, o con gente pululando a mi alrededor. Tampoco puedo hacerlo en un
lugar público, siento pudor, no sé, escribir ha sido siempre para mí algo
íntimo, sagrado y personal. Cuando escribía a mano lo hacía siempre en unos
cuadernos determinados con un mismo tipo de bolígrafo, esa costumbre la
conservo, pero ya casi nunca escribo a mano, solo para anotaciones, resúmenes y
esquemas. Tengo un pequeño portátil al que profeso gran cariño y, aunque
también dispongo de un ordenador de mesa, prefiero mi portátil. Me gusta
escribir en mi habitación, sola, con la puerta cerrada, sentada en mi cama,
entre almohadones y cojines, con el portátil sobre los muslos. Ese es mi rincón
preferido. Generalmente, antes de empezar a escribir enciendo una velita blanca
y/o una barrita de incienso, porque tengo la sensación de que me ayudan a
concentrarme. Si mi marido y mi hijo están en casa, ya saben que espero que no
me molesten, o que lo hagan lo menos posible. Me irrito bastante si me
interrumpen, o sea que ellos mismo prefieren no hacerlo, por su propio bien. Si
hay alguien más que no sea de la casa, entonces no puedo escribir.
6-¿En qué
género te sientes más cómoda?
En la narrativa
contemporánea.
7-¿Planificas
las estructuras de los libros, sabes cómo terminan tus historias antes de
empezar?
Sí y no, depende
de cada libro. Por ejemplo, de la novela que estoy escribiendo ahora hace años
que tenía en mi cabeza el argumento general. Y cuando empecé a escribirla ya
sabía (y sigo sabiéndolo con exactitud) el final de la historia, pero
desconocía los detalles de la trama. Empecé a lo bestia, sin estructura, sin
esquemas, sin una lista de personajes. Sin nada de nada. La novela tenía vida
propia, se escribía sola. Pero a medida que iban surgiendo personajes nuevos, y
la trama iba complicando y adquiriendo detalles hasta entonces desconocidos, no
me quedó más remedio que empezar a estructurarla y anotar los nombres y
características de los personajes, para no perderme yo misma.
8-¿Tienes relación con
tus lectores o lectoras?
No tanto como me
gustaría. Me encanta que me escriban y me den su opinión de lo que escribo, eso
me alimenta, me estimula, me sirve de aliciente para continuar. Algunos
contactan conmigo, pero hay muchos más que no se atreven. ¡Ojalá más lectores
lo hicieran!
9-¿Cuál
es para ti tu mejor libro publicado, suponiendo que tuvieses que elegir uno
solo?
Bueno,
sólo he escrito tres libros y voy por el cuarto. De los dos que tengo
publicados, sin duda Pasión en Marrakech es el mejor, le tengo un gran cariño.
10-El
mercado y la demanda de determinados temas ¿son decisivos a la hora de
escribir?
Supongo
que muchos escritores lo tienen en cuenta, y sobre todo las editoriales. Yo no
funciono así. Escribo sobre una idea que tengo en la cabeza y eso es lo que me
mueve. No me gustaría escribir por obligación sobre un tema solo porque me lo
pidan. Imagino que si tuviera que hacerlo, lo haría, pero no sería lo mismo.
Soy muy visceral en todo lo que hago, y si algo no me sale de dentro se nota,
pierde mucha calidad. Con los tres primeros me he basado bastante en mi experiencia vital. Algo que me ha pasado ha sido el desencadenante o la inspiración, y a partir de ahí he creado una historia. Con la novela que estoy escribiendo ahora ha sido muy diferente. A raíz de una anécdota que me contó una amiga se me ocurrió una idea y la desarrollé. Y eso ha dado lugar al resto de la trama, todo ficción.
12-¿Cuál es tu personaje
favorito de todos tus libros?
Saïd, el protagonista
masculino de mi novela Los ojos de Saïd, aún pendiente de publicación.
13-¿Te identificas con
alguno de tus personajes, o alguno de ellos está inspirado en ti?
Sin duda me identifico
con Sara, la protagonista femenina de Los ojos de Saïd. Y sí, el personaje está
inspirado en mí.
14-¿Cómo te inspiras para
escribir? ¿Cómo se te ocurren tantas ideas?
Si estás alerta, la
propia vida cotidiana te va dando ideas. Las personas corrientes acostumbran a
contar hechos reales, muy interesantes, de algo que les sucedió en el pasado, o
que les está ocurriendo en el presente. Entre mujeres, sobre todo, es frecuente
el intercambio de confidencias. A mí me encanta hablar con féminas de edad
avanzada. Es increíble la cantidad de secretos que guardan en su corazón, y no
sé por qué pero yo tengo como una especie de imán para este tipo de personas.
Debe ser porque hay mucha gente que necesita ser escuchada y a mí me gusta
hacerlo. La verdad es que, a menudo, la realidad supera a la ficción.Pasión en Marrakech.
16-¿En que sitio te
sientes más cómodo para escribir?
En mi rincón: sentada en
la cama de mi habitación, sola, en silencio y con la puerta cerrada.
17-¿Escribes para un
determinado grupo de lectores?
No lo creo. Mi novela Pasión
en Marrakech la han leído hombres; mujeres; adolescentes; personas mayores;
gente muy culta y muy leída; personas casi analfabetas que no habían leído un
libro entero jamás en su vida; gente de pueblo; gente de ciudad; amantes de la
literatura erótica; personas que odian la literatura erótica… Yo soy la primera
sorprendida por este fenómeno. Según me dicen tengo un estilo que engancha, y
aunque mi forma de escribir es pulida y utilizo un léxico bastante amplio y
variado, por lo visto lo hago de manera que el lector se siento atrapado, sea
cual sea su nivel cultural o preferencia lectora (y no me preguntes cómo lo
hago porque no tengo ni idea y solo lo sé porque me lo han dicho).
18-¿Qué consejo le darías
a alguien que quiere ser escritor?
Que no se rinda jamás. Si
alguien quiere ser escritor lo que tiene que hacer es escribir y escribir… sin
parar. A escribir se aprende escribiendo. Y leer, esto es fundamente. El
alimento del escritor es la lectura. Pueden apuntarse a cursos y talleres si lo
desean, pero estoy convencida de que el don de la escritura o se tiene o no se
tiene. Cualquiera puede aprender técnicas, pero no todo el mundo tiene el don.
Eso, en toda disciplina artística, es algo innato. Por ejemplo, cualquiera
puede apuntarse a clases de Pintura pero si no tiene talento nunca lo tendrá,
por muchas técnicas y habilidades que adquiera. Este es mi punto de vista.
Seguro que mucha gente no está de acuerdo conmigo, pero yo lo creo con firmeza,
y lo afirmo con rotundidad. Del mismo modo que considero que en la actualidad
se publican títulos de gran éxito escritos por personas que carecen de talento
literario, y sin embargo ahí están, triunfando, vendiendo y vendiendo sin
parar. Y me da mucha pena que las propias editoriales fomenten este fenómeno, centrando
su objetivo en lo comercial, no en la calidad.
19-¿Cuál va a ser tu
próximo libro?
Una novela que podríamos
ubicar en el género de Narrativa Contemporánea. La trama está ambientada en la
España de los años 30, y contiene grandes dosis de emoción, amor, odio, guerra,
paz… No puedo decir nada más. No me gusta dar detalles de proyectos en los que
estoy trabajando, antes de terminar.
Muchas gracias por contestarnos a las preguntas, me han gustado mucho tus respuestas.
ResponderEliminarun beso
Así es como soy, transparente y sincera, tal vez demasiado. ¡Gracias a ti por la entrevista, Carolina! Un abrazo.
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